viernes, 12 de octubre de 2012

Shakira habló de educación y equidad social con jóvenes en Azerbaiyán


Como parte de su labor como Embajadora de la Unicef, la cantante barranquillera Shakira se reunión con un grupo de estudiantes de la ciudad de Bakú, en Azerbaiyán, para discutir sobre el poder de la educación y cómo ayuda al desarrollo de la juventud.
Shakira, defensora de la educación global, conversó con las adolescentes sobre la forma de aprovechar el poder del deporte para promover el conocimiento de los estilos de vida saludables, así como promover la educación de las niñas y los niños en el deporte a nivel nacional.
La intérprete de ‘Suerte’ llegó a Bakú para el cierre oficial de la Copa Mundial Sub-17 femenina de la Fifa, que será seguido por un concierto en solitario de la cantante en el Baku Crystal Hall.
"El deporte es una forma particularmente eficaz de llegar a las niñas como a los niños, y puede proporcionarles oportunidades para conectarse con los demás socialmente, algo que muchas chicas no son capaces de hacerlo debido a las restricciones que enfrentan como mujeres", dijo Shakira .
"Cuando las niñas tienen la oportunidad de participar en el deporte, pueden desafiar los estereotipos que las etiquetan como menos capaces que los niños. El deporte, como la educación, puede ayudar a las niñas a ser jugadoras de igualdad en la sociedad ", resaltó la barranquillera.





Shakira Ensaya para Presentación en Bakú

Ivete conta como conheceu Shakira

jueves, 11 de octubre de 2012

Shakira apoya la educación de las niñas




Sus mundos no podrían ser más diferentes: Shakira, la superestrella del pop y Embajadora de Buena Voluntad de UNICEF, de 34 años, independiente, atrevida, un nombre familiar para todos, acostumbrada a la admiración y el brillo de la escena mundial. Y un grupo de niñas pobres de Rajastán, de las cuales cuatro se casaron antes de cumplir 11 años y que son todas ellas las primeras mujeres de sus familias en haber recibido una educación. La cantante y Embajadora de Buena Voluntad de UNICEF, Shakira, ha visitado Rajastán, la región con mayor número de novias menores de 18 años. Con su visita Shakira lanza un mensaje al gobierno para que apoye la educación de las niñas alegando que es una inversión y no un gasto. El problema son los condicionantes culturales y la extrema pobreza. UNICEF está apoyando al gobierno en un programa que pretende incluir a estas niñas en un nuevo núcleo de ciudadanos formados para el futuro.


Banda de Shak En Ensayos en Bakú

 
 


Chataing TV Entrevistan a Tim Mitchell

martes, 25 de septiembre de 2012

Carta de Shakira: 'Un futuro rentable para nuestra niñez'

Agradezco a Juanes por invitarme y tener el honor de escribir esta columna.  Hoy tenemos una gran oportunidad para que la juventud y los niños puedan ver, por fin, una Colombia en paz. La paz se construye con la voluntad de las personas que cuentan con las herramientas para lograrla, y estoy convencida de que el medio más eficaz para obtenerla, cultivarla y sostenerla es invirtiendo en educación.
 La educación construye las bases para formar ciudadanos competentes y tolerantes. De ahí la importancia de aunar esfuerzos para lograr una educación de calidad para todos; una educación que les dé la posibilidad a nuestros niños, niñas y jóvenes de crecer felices, aprender de nuestros errores históricos y transformar el mundo. Aproximadamente 70 millones de niños en el mundo no tienen acceso a una educación primaria de calidad: esto sólo puede ser sinónimo de hambre, desigualdad, violencia, discriminación y pobreza. La educación es, sin duda, la solución más accesible. Lo digo porque lo he visto en los procesos de intervención de la Fundación Pies Descalzos, y quiero contárselo a través de uno de estos casi 7.000 niños que han pasado por las escuelas de la Fundación. 

        Juan Carlos, un niño que llegó al barrio de invasión La Victoria, en Quibdó, con su madre y su pequeña hermana, luego de sufrir el desarraigo de su pueblito natal, tuvo que enfrentarse a una cruda realidad, llegar a la capital chocoana a vivir en un barrio conformado por personas desplazadas de Bojayá, en el Atrato medio.A los 10 años ya era responsable de su mamá y su hermana; él, al igual que todos los niños de su comunidad, no tenía posibilidad de educarse, porque no existía ninguna escuela allí. Gracias al apoyo del vecindario, comenzaron a reunir a los niños en las casas y en las calles, para enseñarles a leer y a escribir, y a este grupo se unió Juan Carlos. En el 2004 llega la Fundación Pies Descalzos a esta comunidad, y comenzamos la construcción de una escuela en medio de todas las dificultades que presenta una región tan alejada de las grandes urbes. En el 2005, Juan Carlos, al igual que otros 500 niños, pudieron sentarse en un aula de clase, con su propio pupitre, una maleta con cuadernos, materiales, un almuerzo y merienda diarios, que le permitieron empezar a pintar su mundo de colores. Muy rápido se hizo responsable del grupo de comunicaciones que había en su escuela, apoyó a otros niños en jornadas extraescolares para mejorar su aprendizaje; y hoy, con gran alegría, puedo decir que fue un niño al que la educación salvó de la guerra y de la degradación humana. Hoy estudia medicina en Medellín, y nunca deja de pensar de qué manera apoyar a su escuela y a su pequeña comunidad. Esta historia, entre tantas miles, me permite reafirmar que la inversión en primera infancia y en educación de calidad universal son la senda del éxito para la paz. Como lo dice el presidente (de Israel) Shimon Peres: "Uno de los cinco pilares para el cambio es la educación". Educación para la prosperidad es educación para la paz. Porque un niño que vive rodeado de pobreza, lejos de la escuela, tiene 10 veces más posibilidades de ser reclutado por la milicia que un niño que va a la escuela. Después de 50 años de huellas imborrables de dolor, está en manos de todos que en este paso histórico marquemos un antes y un después en Colombia, y los invito a que nos embarquemos en este proceso de paz y que juntos ayudemos a lograrlo. Este es el momento para construir la Colombia en cohesión próspera, segura y fuerte que nos merecemos y que siempre hemos soñado. Mi interés es contribuir a crear los medios para asegurar el acceso de los más vulnerables a una educación digna, alegre, equitativa, protectora y acogedora, que cultive la solidaridad y el deseo de soñar. Hagamos partícipes a nuestros niños, niñas y jóvenes de la construcción de la paz, puesto que tienen mucho que aportar y enseñarnos.