Cerca de 30 mil personas fueron participes de la gran fiesta que se armó lo noche de ayer con la llegada de Shakira a Puebla en el marco de su “Sale el Sol World Tour”, desde niños hasta adultos movieron las caderas al ritmo de las sensuales y enérgicas interpretaciones de la latina más cotizada del momento. El concierto fue todo un éxito y no hubo daños que reportar.
Desde la gente que estaba en la primera fila, hasta los que ocuparon las últimas gradas, se extasiaron con las canciones de tan famosa mujer de 34 años de edad; excelente audio, alrededor de 15 personas en escena –entre músicos, coros y bailarinas- efectos visuales, luces robóticas y pantallas gigantes fueron parte de la gran velada que se prolongó por más de 90 minutos con 17 canciones.
La cita fue en el Centro Expositor y de Convenciones, lugar a donde los fans de hueso colorado de Shakira Isabel Mebarak Ripoll, como es su nombre completo, empezaron a llegar desde las 08:00 horas, es decir, once horas de anticipación a la anunciada, y mientras trascurría la mañana y tarde del domingo, se registraba mayor movimiento en la zona de Los Fuertes.
Se había prometido que las puertas se abrirían desde las 18:00 horas, y satisfactoriamente para los que hicieron fila desde muy temprano, debido a que los boletos de su localidad (General, Diamante y Oro) no estaban numerados y querían colocarse lo más cerca que se les permitiera, empezaron a ingresar a tiempo y vieron los frutos de su madrugar.
Y mientras se empezaban a llegar también los de las otras localidades (VIP, Gran Vip y Platino), un disk jockey amenizaba al público que ya armaba las “olas” y jugaba con grandes pelotas roji-blancas que flotaban entre la masa, y otros tantos se refrescaban con alguna bebida, una nieve, una chamoyada o botaneaban.
Arrancó gritosEl reloj marcó las 21:45 horas, las luces se apagaron, los músicos, coros y bailarines se acomodaron en su lugar y por fin, apareció la originaria de Barranquilla, Colombia, luciendo un top dorado, legs jeans negros y botas negras, para darle continuidad a una velada llena de aventura y emoción entre sus fans, con temas como “Años luz” y “Te dejo Madrid”.
“Buenas noches Puebla”, saludó, “¿Cómo está mi gente?”, preguntó, “finalmente aquí, que bueno estar aquí, muchísimas gracias por venir… quiero que sepan que esta noche mi único deseo es que se la pasen bien, ¡que disfruten!, ya saben que esta noche soy toda suya”, enfatizó.
Entonces llegó “Suerte” y Shakira al derrochar gran energía incitaba a sus miles de fans a brincar, gritar, bailar o corear, y dijo, “esto es solo para mujeres” e invitó a cinco afortunadas a subir a la tarima para darles una clase rápida sobre cómo mover las caderas hacía delante y atrás, y luego como si se tratara de un grupo de amigas, hicieron medio circulo para entonar el coro del mismo tema, “Suerte”.
Vestuario provocadorLuego presentó una de sus favoritas, afirmó, se trataba de “Inevitable”; al terminar con tal canción se fue a hacer el primer cambio de vestuario y regresó a escena con un top en tono plana, un amplio faldón guinda que le cubría hasta el tobillo, y descalza –como permaneció el resto del espectáculo-. “Nothing else matters” de Metallica y “No hay”, soundtrack de la cinta “El amor en los tiempos de cólera”, siguieron.
Con “Corazón gitano” y al rito de los tambores bailo hasta caer como muerta al piso, y luego se levantó con sensuales movimientos, con “Tortura” se despojó del faldón y se quedó nuevamente con los legs jeans negros, “Ciega sordomuda”, el tema que le da el nombre a su gira, “Sale el sol”, provocó que se rompiera el top plata y quedará con uno más diminuto al tono de su piel.
En “Las de la intuición”, “Loca” y “Loba” presentó un top más, en tono negro con vivos verdes, y con la última canción puso a aullar a hombres y mujeres, niños y adultos, por igual, y con “Ojos así” volvió al top al tono de su piel con un faldón negro con vivos en plata y detalles que simulaban piel de tigre.
Desde la gente que estaba en la primera fila, hasta los que ocuparon las últimas gradas, se extasiaron con las canciones de tan famosa mujer de 34 años de edad; excelente audio, alrededor de 15 personas en escena –entre músicos, coros y bailarinas- efectos visuales, luces robóticas y pantallas gigantes fueron parte de la gran velada que se prolongó por más de 90 minutos con 17 canciones.
La cita fue en el Centro Expositor y de Convenciones, lugar a donde los fans de hueso colorado de Shakira Isabel Mebarak Ripoll, como es su nombre completo, empezaron a llegar desde las 08:00 horas, es decir, once horas de anticipación a la anunciada, y mientras trascurría la mañana y tarde del domingo, se registraba mayor movimiento en la zona de Los Fuertes.
Se había prometido que las puertas se abrirían desde las 18:00 horas, y satisfactoriamente para los que hicieron fila desde muy temprano, debido a que los boletos de su localidad (General, Diamante y Oro) no estaban numerados y querían colocarse lo más cerca que se les permitiera, empezaron a ingresar a tiempo y vieron los frutos de su madrugar.
Y mientras se empezaban a llegar también los de las otras localidades (VIP, Gran Vip y Platino), un disk jockey amenizaba al público que ya armaba las “olas” y jugaba con grandes pelotas roji-blancas que flotaban entre la masa, y otros tantos se refrescaban con alguna bebida, una nieve, una chamoyada o botaneaban.
Arrancó gritosEl reloj marcó las 21:45 horas, las luces se apagaron, los músicos, coros y bailarines se acomodaron en su lugar y por fin, apareció la originaria de Barranquilla, Colombia, luciendo un top dorado, legs jeans negros y botas negras, para darle continuidad a una velada llena de aventura y emoción entre sus fans, con temas como “Años luz” y “Te dejo Madrid”.
“Buenas noches Puebla”, saludó, “¿Cómo está mi gente?”, preguntó, “finalmente aquí, que bueno estar aquí, muchísimas gracias por venir… quiero que sepan que esta noche mi único deseo es que se la pasen bien, ¡que disfruten!, ya saben que esta noche soy toda suya”, enfatizó.
Entonces llegó “Suerte” y Shakira al derrochar gran energía incitaba a sus miles de fans a brincar, gritar, bailar o corear, y dijo, “esto es solo para mujeres” e invitó a cinco afortunadas a subir a la tarima para darles una clase rápida sobre cómo mover las caderas hacía delante y atrás, y luego como si se tratara de un grupo de amigas, hicieron medio circulo para entonar el coro del mismo tema, “Suerte”.
Vestuario provocadorLuego presentó una de sus favoritas, afirmó, se trataba de “Inevitable”; al terminar con tal canción se fue a hacer el primer cambio de vestuario y regresó a escena con un top en tono plana, un amplio faldón guinda que le cubría hasta el tobillo, y descalza –como permaneció el resto del espectáculo-. “Nothing else matters” de Metallica y “No hay”, soundtrack de la cinta “El amor en los tiempos de cólera”, siguieron.
Con “Corazón gitano” y al rito de los tambores bailo hasta caer como muerta al piso, y luego se levantó con sensuales movimientos, con “Tortura” se despojó del faldón y se quedó nuevamente con los legs jeans negros, “Ciega sordomuda”, el tema que le da el nombre a su gira, “Sale el sol”, provocó que se rompiera el top plata y quedará con uno más diminuto al tono de su piel.
En “Las de la intuición”, “Loca” y “Loba” presentó un top más, en tono negro con vivos verdes, y con la última canción puso a aullar a hombres y mujeres, niños y adultos, por igual, y con “Ojos así” volvió al top al tono de su piel con un faldón negro con vivos en plata y detalles que simulaban piel de tigre.
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